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Auckland, Nueva Zelanda. En un giro inesperado que deja a los expertos en bienestar y a los fanáticos del yoga en estado de shock, Nueva Zelanda ha lanzado el primer programa de yoga diseñado específicamente para aquellos que odian el yoga.

El programa, llamado “Zen No Más”, ofrece una alternativa revolucionaria para los que ven el yoga como una tortura (y no como una forma de alcanzar el nirvana). En lugar de asanas complicadas y respiraciones profundas, los participantes se limitan a acostarse, quejarse y tomar café en una pose de meditación que cualquier mortal promedio reconocería como “el descanso después del trabajo”.

¿Cómo funciona este programa?

Paso 1: Colócate en una posición cómoda (preferentemente en el sofá, sobre la cama o en el suelo, si eres un verdadero rebelde).
Paso 2: Haz comentarios sarcásticos sobre lo difícil que es la vida, los plazos de trabajo, y las responsabilidades que te asfixian.
Paso 3: Tómate un café (el yoga se hace mejor con cafeína).
Paso 4: Respira profundamente, pero solo porque estás agotado de quejarte, no porque estés buscando el equilibrio interno.
Paso 5: Repítelo todo mientras intentas que no se te derrame el café sobre tu camiseta.

Lo mejor es que, al final de la sesión, en vez de “sudar la tensión” como en el yoga tradicional, lo que lograrás será una liberación profunda… de estrés y tal vez un par de cafés vacíos.

Testimonios de participantes

“¡Yo pensaba que el yoga era todo un desafío físico! Pero ahora… ¡me reto a no derramar el café! Eso sí que es un ejercicio mental.”
—@PanchitoZen

“Mi espalda nunca estuvo tan tranquila. ¡Ojalá todo en la vida fuera tan relajante como acostarse a quejarse!”
—@CansadoDeTantasPosturas

“¿Qué se supone que debo meditar? ¿Que los problemas no se resuelven haciendo posturas? ¡Eso lo sé desde que nací!”
—@SoyFelizPorqueNoMeEsfuerzo

¿Un cambio en el mundo del bienestar?

Los expertos en salud mental no tardaron en comentar sobre el innovador enfoque del yoga, sugiriendo que «si aceptar que la vida es un caos y no intentar controlarlo puede ser la verdadera liberación, tal vez haya algo aquí». Sin embargo, otros piensan que es una trampa para que los neozelandeses sigan comprando café.

La verdad es que, si algo hemos aprendido de este programa es que, el yoga no tiene que ser perfecto, sólo tiene que ser divertido. Y si no quieres hacer una postura de perro mirando hacia abajo… ¡al menos puedes hacer una postura de sofá mirando hacia Netflix!

Yoga sin esfuerzo, café con propósito

Al final, el programa de yoga para los que odian el yoga está demostrando que el bienestar no tiene por qué ser complicado ni doloroso. Con un poco de queja y mucho café, puedes encontrar la paz… o al menos eso te dirán cuando el café haga efecto.

Este nuevo enfoque es probablemente la solución para todos los que temen la flexibilidad (mental o física). Y mientras unos buscan la iluminación, otros simplemente la encuentran en el café… sin necesidad de estirarse ni un milímetro.