Skip to main content

Si las empanadas de carne fueran una persona, serían ese amigo fiel que siempre te acompaña, listo para alegrarte el día. ¿Por qué? Porque una empanada de carne bien hecha tiene el poder de levantar el ánimo hasta en los días más grises. ¡Vamos a crear esa alegría juntos!

Ingredientes (para una fiesta de sabores):

  • Harina de maíz precocida blanca: 275 g (el alma de la empanada)
  • Agua: 365 ml (que da vida a la masa)
  • Sal: 5 g (esencial para el equilibrio)
  • Aceite de girasol: Para la masa y para freír, ¡que no se te olvide!
  • Carne de res desmenuzada o molida: 250 g (el corazón del relleno)
  • Cebolla: 1 (porque sin cebolla, la vida es menos sabrosa)
  • Pimiento verde: ½ (para darle un toque fresco)
  • Pimiento rojo: ½ (el color de la pasión)
  • Aceite de oliva virgen extra: 2 cucharadas (solo lo mejor para ti)
  • Comino en polvo: 1 cucharadita (¡el secreto del sabor!)
  • Ajo en polvo: 1 cucharadita (porque siempre es mejor con ajo)
  • Perejil fresco: Un toque fresco que lo cambia todo
  • Sal y pimienta negra: Al gusto

Elaboración (donde empieza la aventura):

  1. El relleno que te hará suspirar: Sofríe la cebolla y los pimientos hasta que empiecen a brillar de tanto sabor. Añade la carne de res y condimenta con comino, ajo, sal y pimienta. Deja que todos esos sabores se mezclen como una sinfonía. Cuando todo esté listo y delicioso, déjalo enfriar en la nevera.
  2. La masa: el abrazo perfecto: Igual que en la receta de pollo, mezcla la harina con el agua y la sal, amasa durante unos minutos y deja reposar en la nevera. Esta masa es la encargada de contener toda esa delicia que has preparado.
  3. Formar la magia: Estira la masa entre film transparente y coloca una generosa porción del relleno en el centro. Cierra con cariño y corta en forma de media luna, como si estuvieras guardando un tesoro secreto.
  4. El dorado perfecto: Fríe tus empanadas en aceite caliente hasta que estén doradas y crujientes. Sácalas con cuidado, deja que escurran el exceso de aceite y prepárate para disfrutar de una auténtica joya culinaria.

Estas empanadas no son solo comida, son una fiesta de sabor que te hará sonreír de oreja a oreja. ¡Cada bocado es una explosión de alegría y tradición!