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Si hay algo que une a los venezolanos, es el amor por las arepas. Redondas, doraditas y listas para ser rellenadas con todo lo que se te ocurra. Aquí te dejo la receta para hacer la mejor masa de arepas y algunos consejos para que los rellenos te queden tan buenos que no querrás comer otra cosa.

Ingredientes (para 6 arepas):

  • Harina de maíz precocida blanca: 180 g (la de siempre, ya sabes cuál es).
  • Agua fría: 300 ml (bien fría, para que la masa quede suave y manejable).
  • Sal: 1 cucharadita (ni mucha, ni poca, lo justo para que no te quede sosa).
  • Queso rallado (para el relleno): 90 g (queso fresco o el que más te guste).
  • Pechuga de pollo cocida (para el relleno): 1 (bien desmechada, como para que se derrita en la boca).
  • Aguacate pequeño (para el relleno): 1 (machacadito, porque aguacate es vida).

Cómo hacer la masa para arepas (porque todo empieza aquí):

  1. La base del asunto: En un bol grande, mezcla la harina de maíz, el agua fría y la sal. Mete las manos (no seas flojo) y amasa bien hasta que te quede una mezcla homogénea, que no se pegue ni esté demasiado dura. Cuando la tengas lista, forma una bola bien bonita y déjala descansar en la nevera, envuelta en film transparente, por unos 15 minutos. ¡Que repose un rato, la masa también merece un break!
  2. Hora de las pelotas: Saca la masa y divídela en seis bolas del mismo tamaño. Aquí es donde empieza la diversión. Con las manos, aplanas cada bola con cariño, como si estuvieras dándole forma a tu creación maestra. Que no queden ni muy finas ni muy gruesas, así lograrás esa textura crujiente por fuera y suave por dentro.
  3. A la sartén: Calienta una sartén antiadherente con un poco de aceite de oliva (sí, usamos oliva porque nos gusta darle un toque especial). Cocina las arepas a temperatura media-baja durante unos seis minutos por cada lado, o hasta que estén doraditas y suenen huecas cuando las golpees suavemente. Si te desesperas y las subes de fuego, quedarán crudas por dentro… ¡paciencia, amigo!
  4. El gran momento: ¡Rellenarlas! Haz un corte en uno de los lados de la arepa (con cuidado, que queman). Ahora, llega la parte más deliciosa: rellénalas al gusto. En este caso, vamos con una combinación ganadora: queso rallado, pollo desmechado y aguacate machacado con un tenedor. ¡La reina pepiada en todo su esplendor! Pero si te sientes creativo, las opciones son infinitas…

Ideas de rellenos arrechos para tus arepas:

  • Reina Pepiada: La mezcla estrella de pollo, aguacate y mayonesa. ¿Una arepa que se siente reina? ¡Sí, por favor!
  • Arepa Pelúa: Rellena con carne mechada y queso amarillo. Porque el queso y la carne son la pareja perfecta.
  • Arepa Pabellón: Este relleno es la versión arepera del pabellón criollo. Llénala con carne desmechada, frijoles negros, plátano frito y queso. Con una de estas, aguantas el día entero.
  • Arepa Dominó: Frijoles negros y queso blanco fresco. Simple, clásico y delicioso. No necesita más.

Ya sea para desayunar, almorzar, cenar o para matar el antojo a cualquier hora, ¡las arepas son el plato más versátil del planeta! Haz la masa como te enseñé, rellénalas con lo que más te provoque, y prepárate para escuchar aplausos (o quedarte en silencio mientras todos disfrutan). ¡Buen provecho!